Acelera la entrega: Al desarrollar con mayor frecuencia y reducir los tiempos de espera, los equipos pueden adaptarse a la inmediatez del mercado y satisfacer las necesidades del cliente de manera más efectiva.

Mejora la calidad del producto: Reducir la tasa de fallos en los cambios significa que menos errores, regresiones y otros problemas llegan a los usuarios. Esto puede conducir a una mejor satisfacción y confianza del usuario.

Aumenta la eficiencia operativa: Al restaurar ágilmente el servicio después de una incidencia, los equipos minimizan las interrupciones en sus procesos y aseguran que los usuarios tengan acceso constante a los servicios y productos.

Mejora la colaboración a través de evaluciones periódicas: Los procesos optimizados a menudo implican una mejor colaboración entre equipos, como los Departamentos de Desarrollo y Operaciones. Al mismo tiempo, tener feedback en vivo y dinámico, repercutirá directamente a un desarrollo más iterativo y receptivo.

Software de mayor calidad: Con pruebas regulares y ciclos rápidos de retroalimentación, la calidad del código es más alta con menos defectos a la hora de llegar a producción.

Ciclos de lanzamiento más rápidos: Dado que los errores se detectan y corrigen en una fase temprana, hay menos intercambios entre Desarrollo y QA, lo que lleva a lanzamientos más rápidos.

Reducción de costes de prueba: Las pruebas automatizadas pueden reducir significativamente el esfuerzo manual y los costes asociados.

Mejora en la productividad del Desarrollador: La evaluación inmediata permite a los Desarrolladores abordar problemas mientras el contexto aún está reciente, reduciendo los costes y mejorando la eficiencia.

Mayor confianza: Saber que cada cambio es probado da confianza a los equipos en sus lanzamientos y reduce el riesgo de problemas imprevistos en la producción.